POR UNA VIDA MÁS SANA Y NATURAL

La medicina natural estimula la vitalidad y ayuda a recuperar el equilibrio de las funciones corporales.
Es utilizada desde hace siglos para aliviar dolores y sufrimiento.

jueves, 16 de junio de 2016

RELACIÓN PESO CORPORAL-DESECHOS TÓXICOS

                                         
En ocasiones, o durante largas temporadas, se tiende a exagerar la comida y el picoteo. Esto hace que llenemos nuestro cuerpo de alimentos no  muy saludables. A esto si sumamos el comer fuera de casa, con prisas, con ansiedad y el estrés, hace que uno se sienta como un saco a punto de explotar.

Es muy importante moderar y mejorar la alimentación sin excluir ningún tipo de nutrientes principales y sin saltarse ninguna comida. Hay que revisar la repartición de los alimentos durante el día, y si se encuentra algún déficit utilizar algún complemento alimenticio que contribuya a  regular la absorción de los nutrientes.

Sin embargo, también puede ocurrir que se adopte una buena alimentación y que esté equilibrada y se tenga dificultad para perder peso. Entonces lo que hay que hacer es aumentar la actividad física, especialmente en personas sedentarias, de esta forma se aumenta la quema de calorías, además de utilizar algún complemento de fitoterapia adecuada a su situación.

                                    

Es muy común encontrarse con que no se pierde adecuadamente peso y uno se siente hinchado y pesado, pues esto es común en los casos de retención de líquidos que se debe a una acumulación de desechos. En estos casos suele ser suficiente con aumentar un poco la actividad física y utilizar complementos alimenticios que activen el metabolismo y contribuyan a expulsar todos los desechos acumulados.

Es importante a su vez estar bien hidratado, se recomienda la toma de 2 l. de agua diarios que ayudaran a restablecer el equilibrio hídrico, que facilita la eliminación de excesos de líquido y de catabolitos favoreciendo un correcto equilibrio del peso corporal.
                                            

Por esto es muy recomendable el uso de plantas con acción drenante y depurativa que actúan particularmente sobre las funciones del hígado y los riñones, que son los dos órganos principales encargados de realizar estas funciones de limpieza.


jueves, 9 de junio de 2016

ARROZ INTEGRAL

                         


El arroz es conocido como “el pan de Asia” y constituye un alimento básico para buena parte de la población mundial, siendo el cereal más consumido en el mundo después del trigo. Es un alimento emblemático de los países asiáticos donde es impensable una comida sin este cereal.

Un cereal indispensable en la mesa por su aporte nutritivo, su fácil elaboración, la gran variedad de preparaciones y su sabor suave y delicado.

El origen de este cereal es un tema controvertido y existen varias hipótesis sobre el mismo. Algunos historiadores afirman que el cultivo del arroz se inició hace unos 7000 años en el sudeste asiático. Otros estudiosos sitúan su origen en África desde donde se extendió posteriormente a Asia. Y una tercera teoría sostiene que surgió en ambos continentes a la vez.

El arroz es una especie monocotiledónea anual, perteneciente a la familia de las poáceas (gramíneas). La mayoría de los cultivos de arroz corresponden a la especie Oryza sativa L.

                                 

El arroz integral, llamado también arroz pardo o arroz moreno, es arroz al que solo se le ha quitado la cáscara exterior o gluma, no comestible. Conserva el germen íntegro con la capa de salvado que lo envuelve, lo que le confiere un color moreno claro.

Para producir el arroz blanco, el grano integral se somete a un proceso de refinado con el cual se le retira la capa exterior y el germen, y lo que queda es el endospermo que está constituido principalmente de almidón.

En el mercado se puede encontrar arroz blanco o refinado y arroz integral, actualmente los dos formatos son comercializados por casi todos los países, por no decir todos. De tal forma que toda la población mundial podría tener acceso a este cereal.

                                     

Desde el punto de vista nutricional y para la salud es más recomendable utilizar el arroz integral. Las principales diferencias es que el arroz integral posee mucha más fibra, vitaminas y minerales que el arroz blanco ya que estos se encuentran principalmente en su capa externa, conocida como salvado y es precisamente lo que se elimina en el proceso de blanqueado del arroz.
El arroz integral también conserva el germen, que es eliminado en el arroz blanco, que aporta proteínas y ácidos grasos. La capa de aleuronas del germen contiene elementos que eliminan la angiotensina que influye en el desarrollo de la arteriosclerosis y la hipertensión.

El arroz integral está compuesto de proteínas, grasa, hidratos de carbono, vitaminas y minerales.



PROTEÍNAS
Su contenido en proteínas es más bajo que el de otros cereales como la avena o el trigo, pero al no contener gliadina es ideal para las personas celíacas. La proteína del arroz es deficitaria en dos aminoácidos: el triptófano y la lisina que se encuentran en cantidades importantes en las legumbres. Es por ello que al combinar legumbres con arroz el organismo obtiene los aminoácidos para que junto con las propiedades del arroz el cuerpo sea capaz de producir proteínas de calidad. Además de todo esto diremos que el arroz integral contiene un número mayor de proteínas que el arroz blanco.

GRASAS
El arroz integral posee tan solo un 2,7% de grasas. Los ácidos grasos del arroz so insaturados, es por ello que el arroz no debería faltar en ninguna dieta.

HIDRATOS DE CARBONO
El contenido de hidratos de carbono es muy elevado (presenta un 73%), siendo prácticamente todo almidón. Y contiene un 3,4% de fibra.

VITAMINAS Y MINERALES
Aporta vitaminas E, B1 (tiamina), B3 (niacina), B6 (piridoxina), B2 (riboflavina) y folatos. Su aporte mineral es de magnesio, potasio, fósforo, calcio, hierro, zinc y sodio.

Por su contenido en fibra el arroz integral ayuda a regular el funcionamiento intestinal, reduce los niveles de colesterol y previene el cáncer de colon.
Es un alimento ideal para diabéticos ya que no altera los niveles de glucemia e insulina, además de que la fibra impide a absorción del azúcar de los alimentos regulando así los niveles de glucosa en sangre.
Por su escaso contenido en sodio (4%) es útil en casos de hipertensión arterial y enfermedades cardiovasculares en general.

Por su efecto alcalino se recomienda en casos de gota y ácido úrico.