POR UNA VIDA MÁS SANA Y NATURAL

La medicina natural estimula la vitalidad y ayuda a recuperar el equilibrio de las funciones corporales.
Es utilizada desde hace siglos para aliviar dolores y sufrimiento.

martes, 31 de marzo de 2015

CROMOTERAPIA


Existen numerosos estudios científicos que han demostrado que el tipo de colores que nos rodean influyen en gran medida en nuestra calidad de vida. Esta evidencia ha dado lugar a la ciencia conocida como “cromoterapia”.

                      

Esta disciplina investiga la influencia de determinados colores en nuestro estado de ánimo y en nuestra salud, y viceversa, lo que dice acerca de cada individuo y de su estado físico y mental según la elección de los colores de cada momento. Por lo tanto, se puede deducir, que a partir de estas teorías si se realiza una correcta elección de los colores podemos ayudar  a equilibrar un estado de ánimo y conseguir recuperar la armonía perdida.

Los orígenes de la cromoterapia se remontan al s. XIX. El científico Edwin Babbitt dio a conocer por aquella ápoca la teoría que relacionaba ciertos colores específicos con una lista de enfermedades o afecciones.

Unos años más tarde, el test de Lüscher demostraba que los colores estimulan diferentes regiones del sistema nervioso. Y por último, y no menos importante, los trabajos de los premios Nobel Niels R. Finsen y Albert Szent-Coyörgyi han indicado el camino a muchos especialistas que estaban convencidos de esta relación entre colores y afecciones, para poder efectuar un diagnóstico preciso sobre el individuo, destacando particularidades sobre su carácter, estado de ánimo, deseos, habilidades y de su estado de salud.

En psicología experimental se han realizado diferentes valoraciones y observaciones sobre el significado de los colores. 


A continuación muestro las características principales de algunos colores.

AMARILLO: Principalmente está asociado a la ira, pero se le asocian otras emociones como la falsedad, el atrevimiento o la antipatía. Se ha comprobado que utilizando el color amarillo en cromoterapia se consigue estimular la capacidad intelectual, elevar el estado de ánimo y proporcionar alegría y optimismo. Es muy recomendado en personas que presentan una especial tendencia a la melancolía y la tristeza.

NARANJA: Este color se asocia a la vitalidad, el entusiasmo y la alegría. Cuando se presenta unido al negro, representa los deseos reprimidos y la intolerancia. Utilizando este color en terapia ayuda a intensificar la capacidad intelectual y ayuda a reducir la angustia.

VERDE: Este color se asocia con personas sociables e intelectuales. Es símbolo de relajación. Sus efectos ayudan a equilibrar emociones y el sistema nervioso autónomo. Disminuye la presión sanguínea y estimula la glándula pituitaria. Este color es el que menos fatiga la vista. Al estar compuesto por dos colores, amarillo (emoción) y azul (juicio) es un tono de gran equilibrio.

ROSA: Por excelencia el color de la ternura. Cálido y de autoayuda. Con sus efectos ayuda a despejar la mente de pensamientos negativos, proporciona energía y suaviza el carácter. Potencia la dulzura, la constancia y la delicadeza.

BLANCO: Color asociado al prestigio, la economía, la distinción, el silencio, la ligereza, la tranquilidad y la limpieza. Es la suma de todos los colores. Su efecto otorga dominio del espíritu sobre la materia y permite la evolución espiritual.

GRIS: El color de los opuestos. Representa la fusión del yin y el yang, entre las alegrías y las penas, entre el bien y el mal. Este color sugiere neutralidad y tristeza.

NEGRO: Símbolo del mal y lo erróneo. Es la ausencia total de luz y color. Provoca cansancio y exige un mayor desgaste de energía gel organismo.

                                

La cromoterapia afirma que cada persona matiza su propio universo por los colores predominantes de su carácter o de sus reacciones emocionales habituales. Según esta terapia, cada persona tiene su propio color, que va acorde con su personalidad, aunque este no es inmutable. Cada uno de nosotros cambiamos de color según las situaciones y el estado de ánimo.

Así que…¿Cuál es tu color?

lunes, 9 de marzo de 2015

HABLEMOS DEL CORAZÓN


El corazón es el eje del aparato circulatorio y su función es la de llevar la sangre desde ese órgano a las distintas partes del cuerpo según las necesidades funcionales y su retorno. De esta forma se produce el transporte, el intercambio y la eliminación de sustancias.

El corazón actúa como una bomba que envía a través de los vasos sanguíneos la sangre a las arterias y la distribuyen por todos los tejidos. Las venas, en cambio, son las encargadas de  conducir nuevamente la sangre al corazón.



El corazón es al mismo tiempo el órgano más admirado y el más temido. Sus fallos pueden ser letales ya que es la bomba de la vida. Así que mantenerlo en buenas condiciones es una garantía de salud.
Los factores de riesgo más comunes para prevenir problemas cardíacos son la hipertensión y la hipercolesterolemia.

El temido colesterol no es “malo” en sí mismo. De hecho es imprescindible en el organismo para poder realizar las funciones correctamente. Es un componente fundamental de las membranas celulares, donde contribuye a regular su fluidez y resulta imprescindible para la formación de vitamina D, de diferentes hormonas y de las sales biliares encargadas de emulsionar las grasas para facilitar la digestión y de eliminar el propio colesterol sobrante.

Cuando el colesterol aumenta por encima de sus valores normales en sangre, os topamos con la hipercolesterolemia que se asocia a todo tipo de problemas coronarios.

Existen dos tipos de colesterol: el colesterol “malo” (LDL) y el colesterol “bueno” (HDL). El primero se deposita en los vasos sanguíneos y los obstruye, lo que provoca directamente un factor de riesgo en enfermedades cardiovasculares. El segundo favorece la eliminación del primero e impide su depósito en la sangre.
El colesterol procede de dos fuentes bien diferenciadas; el que produce nuestro organismo a través del hígado y el que ingerimos a través de la alimentación.

En la mayoría de los casos un aumento de colesterol es consecuencia de una alimentación inadecuada con un alto contenido en grasas saturadas. También puede ser producida por una ingesta desproporcionada de alcohol. Y en ocasiones se debe simplemente a una predisposición genética. En este último caso es muy recomendable llevar una alimentación estricta ya que este problema es causa de un nivel elevado de mortalidad en edad temprana. Otras enfermedades como el hipotiroidismo, la diabetes, la cirrosis hepática, incluso otros medicamentos, también incrementan los niveles de colesterol en sangre.

La hipertensión arterial constituye uno de los problemas de salud más importantes en los países desarrollados. Afecta aproximadamente a una 20% de la población adulta y es un factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares, que a su vez constituye la primera causa de muerte en países desarrollados.

La hipertensión arterial es el aumento crónico de las cifras de presión arterial sanguínea por encima de los valores establecidos como correctos.

La mayoría de las veces se desconoce la causa de la hipertensión, no obstante existen factores que se presentan en la mayoría de los casos.

Para que se produzca una alteración de los mecanismos reguladores de la tensión arterial se requiere la presencia de una base genética que responde inadecuadamente ante determinados factores ambientales, entre los que destacan determinado hábitos de vida como el consumo continuado de alcohol, el estrés, la vida sedentaria, una alimentación inadecuada o sobrepeso, entre otros.


En naturopatía, plantas como el Ajo, la Alcachofa, el Espino Blanco, el Olivo,  el Abedul, la Cola de Caballo, la Grama, la Vara de Oro, et., ayudan a combatir estos factores perjudiciales para la salud.

Se obtienen mejores resultados si se utilizan combinaciones de estas plantas, ya que así se produce una sinergia entre sus principios activos y su efectividad aumenta. De todas formas es aconsejable consultar con un naturópata de confianza para asegurar la combinación de plantas que sea más adecuada para cada caso.